Cuenta la leyenda que, en los albores de la orden de los guardas, los Guanteletes fueron usados por primera vez por un guarda anónimo que llegó del Este. Es difícil demostrar la veracidad de esta leyenda, pues cualquier prueba que pueda haber yace enterrada en las arenas del tiempo. Sin embargo, los Guanteletes poseen cualidades especiales que los diferencian de otras armas, siendo estos muy famosos entre los guardas. Las primeras impresiones del arma dicen que, así como las Espadas dobles, la victoria se alcanza mediante una velocidad de ataque superior. Por otro lado, si bien quienes usan las Espadas dobles, atacan sin dejar de moverse, aquellos que usen los Guanteletes son excelentes al infligir un daño fulminante en un punto específico. Los guardas que portan Guanteletes pueden arremeter contra un Bégimo y repartir una lluvia de intensos golpes a sus extremidades, lo que deja inconsciente a su víctima. Las habilidades de batalla que otorgan incluyen habilidad para esquivar mejorada, algo vital cuando se trata de sobrevivir para continuar tu embate sobre un Bégimo.
Participar en la batalla con Guanteletes otorga al portador una alegría violenta; un estilo de combate efusivo, mejor acompañado por un fuerte licor si se quiere disfrutar plenamente de la emoción de la pelea, según el guarda Cedric. Esta opinión ha sido respaldada muchos partidarios entre el batallón de guardas.